Hoy os voy a enseñar cómo hacer un diseño web que acojone y ahuyente a cualquier incauto al que se le ocurra entrar a la página de tu hotel para realizar una reserva.
El primer ingrediente para tan ansiado cóctel pasa por colocar un mensaje en rojo nada más entrar como si se tratase de una página porno (o en este caso un burdel) y uno deba confirmar ser mayor de 18 años.
Para continuar, pondremos un mensaje como éste del que muestro un extracto:
La dirección del Hotel La Residencia, se reserva el derecho de establecer jurídicamente las denuncias que sean menester ante los Tribunales y competencias legales que corresponda contra cualquier empresa que ilegalmente publique en Internet alguna crítica de nosotros a través de presuntos clientes que dicen haber estado en nuestro establecimiento. Estas empresas – generalmente agencias de viajes de dudosa legalidad-y a efectos de captar clientes de una manera delictiva, no dudan en publicar y evaluar sin control las críticas que les llegan de nuestro Hotel. (…)
Y sigue. Ya que nuestro objetivo es que el cliente además de pensar que ha entrado en la página de un burdel piense “qué coño tendrá esta gente TAN MALO que hasta amenazan con denunciarte si lo cuentas”.
Y por si con esto no tiene suficiente, cuando entre en la web mostraremos unas curiosas hormigas recorriendo la misma para que el cliente capte ya desde el inicio la esencia de nuestro hotel y lo confortable del mismo… vamos, como ir al camping eh.
Y lo rematamos con fotos a lo visillera 2.0 mostrando un perro en una silla y las múltiples obras de arte alrededor del propietario, que mi duda es, ¿está promocionando el Hotel o a si mismo?
¿¡Pero quién ha diseñado esta página por dios!? No voy a comentar otros detalles como diversos textos por encima de imágenes o divs rotos en Firefox porque quizás son menos obvios y tras lo visto esos detalles pasan desapercibidos…
Fuente: Menéame